FIEBRE TIFOIDEA
FIEBRE TIFOIDEA
(Salmonellosis)
Etiología La fiebre tifoidea es una enfermedad febril aguda de origen
entérico producida por la Salmonella typhi. En raras ocasiones
Salmonella paratyphi A, paratyphi B (Salmonella schottmuelleri)
y Salmonella paratyphica C (Salmonella hirschfeltii) pueden
producir un cuadro clínico similar, aunque de menor gravedad. Estas Salmonellas sólo afectan al ser humano.
La mortalidad con un tratamiento adecuado es casi nula
y las complicaciones mas graves suelen ser la perforación y la
hemorragia intestinal.
El género Salmonella pertenece a la familia Enterobacteriaceae,
son bacilos gramnegativos, no formadores de esporas, anaerobios facultativos, provistos de flagelos y móviles. Crecen
bien en los medios de cultivo habituales. De acuerdo con la
presencia de los antígenos O (lipopolisacárido), Vi (polisacárido capsular) y H (flagelar) pueden actualmente serotiparse
en más de 2.300 serovariedades.
Enterobacteria
Salmonella tiphy
4000x
(Microscopio electrónico)
Manifestaciones clínicas
Por haber sido una patología muy prevalente en nuestro medio en décadas anteriores, las generaciones de clínicos que
nos han precedido, con menos medios diagnósticos que nosotros, hicieron un esfuerzo encomiable por buscar matices
clínicos específicos que ayudaran al diagnóstico de la enfermedad, dejándonos bellos y minuciosos tratados, pero poco
prácticos ya que en la mayoría de las ocasiones la enfermedad
se presenta como un cuadro sistémico caracterizado por fiebre y malestar general indistinguible del comienzo de otras
enfermedades habituales en nuestro medio de etiología infecciosa, tumoral o autoinmune.
El periodo de incubación suele ser variable, entre 2 y 3 semanas, el comienzo insidioso y los síntomas predominantes son
fiebre de intensidad variable, cefalea, diarrea, estreñimiento, tos,
náuseas y vómitos, anorexia, dolor abdominal y escalofríos.
Cuando exploramos al paciente los signos más habituales
que podemos encontrar son hepatoesplenomegalia, reséola,
lengua saburral, bradicardia relativa y a veces estupor. No es
habitual encontrar herpes labial.
Diagnóstico
Aunque la clínica y los antecedentes epidemiológicos nos son
útiles, el diagnóstico se basa en el aislamiento de la Salmonella typhi, fundamentalmente en los hemocultivos que suelen
ser positivos en la primera semana en el 90% de los casos,
perdiendo sensibilidad con el paso de los días (50% en la
tercera semana).
El coprocultivo y el urocultivo suelen ser negativos en la
primera semana y terminan siendo positivos en el 75% de los
casos en la tercera semana. En el caso de un portador crónico el coprocultivo positivo puede inducir a error.
También se puede aislar el microorganismo en la médula
ósea (permite el aislamiento del germen al comienzo de la
enfermedad, incluso en aquellos que han recibido antibióticos) y en lesiones de la piel (roséola).
El diagnóstico serológico cada vez se utiliza menos por
su baja sensibilidad y especificidad. Puede ser útil en aquellos
pacientes en los que se sospecha la enfermedad y que han tomado antibióticos antes de la toma de hemocultivos siendo
éstos negativos. Títulos de anticuerpos tipo Ig M anti-O superiores a 1/640 o aumento de valores de títulos basales en 4
o más veces tienen valor diagnóstico.
Las técnicas de reacción en cadena de la polimerasa
(PCR) aún no están siendo utilizadas de forma rutinaria en
la mayoría de los laboratorios.
¿COMO SE CONTAGIA Y PREVIENE?
Están basadas en medidas sociosanitarias, con buen control
de las aguas residuales, sistemas de abastecimiento de aguas
y manipulación de alimentos.
Extremar la higiene personal teniendo especial cuidado
con el lavado de manos.
En caso de viaje a las zonas endémicas o en situaciones
de catástrofes se recomienda la inmunización, ya que se dispone de dos tipos de vacunas que aseguran una protección
eficaz durante dos años. La vacuna parenteral está elaborada con antígeno Vi. La vacuna oral con una mutante atenuada, no estando por tanto indicada en casos de inmunodeficiencia (por ejemplo personas infectadas por el VIH) o
mujeres embarazadas.
Referencia bibliográfica: http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/pdf/Tifoidea_otras_salmonellas_Medicine201o0.pdf
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